Cada vez es más común que los procesos de aprendizaje y los cursos de formación se lleven a cabo de forma digital y a través de internet. Esto permite a empresas y profesionales formar a las personas de manera más eficaz, ahorrando mucho tiempo y recursos.

Pero para que ese aprendizaje sea efectivo y ameno, es fundamental crear contenidos atractivos y que capten la atención de quien está al otro lado de la pantalla. A continuación destacamos algunos aspectos que marcarán la diferencia a la hora de captar la atención en un curso de elearning:

Información clave

Es preferible que el título del curso sea breve y claro. Esto ayudará a llamar la atención de la gente desde el principio y tendrán mayor motivación para comenzar.

El contenido también debe estar centrado en los aspectos clave, en lo importante. Descarta la información innecesaria y que no aporte valor. Así, evitarás posibles distracciones y conseguirás mayor concentración y mejor experiencia por parte de las personas usuarias.

Pero ten cuidado con ahorrar en detalles; no des nada por hecho ni por entendido. Un curso de elearning, ante todo, debe ser accesible y comprensible para cualquier persona destinataria. Para ello, por ejemplo, existe la posibilidad  de establecer varios niveles de dificultad o de tiempo para que el aprendizaje sea gradual.

Contenido personalizado

Personaliza el contenido para hacerlo más cercano y así dirigirte a tu público de forma más directa. Puedes utilizar los nombres de las personas usuarias, los colores corporativos, fotografías, ejemplos que les resulten cercanos, etc. Las posibilidades son muchas, todo depende de tu creatividad.

Para captar la atención de la gente y salir de la monotonía, utiliza el efecto sorpresa. No sigas siempre los mismos esquemas e introduce algo inesperado.

Diversión

Siempre que puedas, utiliza un lenguaje ameno y permítete ciertas licencias humorísticas. Esto hará que el contenido resulte más atractivo y activará ciertas regiones cerebrales relacionadas con la memorización. Piensa en el humor no solo como entretenimiento, sino como un recurso formativo valioso. Divierte y vencerás.

Recursos multimedia

No te limites a llenar las pantallas de texto. Haz uso de recursos multimedia y audiovisuales como vídeos, fotos o iconos. Para ganar en dinamismo, alterna entre distintos tipos de recursos, pero asegúrate de que estén integrados con el resto de contenidos.

Participación

Mantén activo al alumnado para que permanezca despierto y atento; que no sean  sujetos pasivos, sino elementos activos y principales dentro del itinerario formativo. Las maneras de llevar esto a la práctica son muchas: responder a preguntas, tomar decisiones, interactuar con los contenidos, arrastrar objetos en la pantalla, participar en foros o actividades grupales, discurrir sobre un tema concreto… 

Evocar emociones

Las emociones nos hacen empatizar, crean vínculo con el contenido y las personas que promueven el curso y dan significado a la acción formativa. La emoción favorece el aprendizaje y hace que la persona se implique más con lo que está aprendiendo. Si logras que el concepto a aprender quede almacenado en la memoria unido a una emoción, se favorecerá a su vez su comprensión y la capacidad de recuperación posterior de ese conocimiento (cuando sea necesario ponerlo en práctica a posteriori).

Narrativa

Introducir personajes, temáticas o lugares en la acción formativa puede ayudar a crear un hilo conductor y favorecer así el aprendizaje. El cerebro humano está preparado para aprender a través de historias, ya que durante siglos esta ha sido la forma más común de transmitir el conocimiento. Además, las narrativas contienen un alto componente motivador y te permitirán dar coherencia al relato global que quieres transmitir.

Gamificación

Aprovecha los beneficios de la gamificación en el aprendizaje e incluye elementos más amenos y divertidos que inciten a querer continuar con la formación. En este sentido, elementos como puntuaciones, barras de progreso, minijuegos, recompensas o la adición de retos o misiones funcionan muy bien a la hora de captar y mantener la atención.

Uso del del lenguaje

En entornos de aprendizaje online, la comunicación debe ser fluida. Aléjate del lenguaje excesivamente formal y opta por un registro más cercano y natural para conectar mejor con las personas. 

El lenguaje inclusivo en cuanto al género todavía no está presente en muchos ámbitos, pero eso no significa que no debamos utilizarlo. El lenguaje es inclusivo cuando “no discrimina a un sexo, género social o identidad de género en particular y no perpetúa estereotipos de género”. Por ejemplo, en el ámbito científico, es recomendable usar el término “comunidad científica” en lugar de “científicos”. No te pierdas nuestras futuras publicaciones en las que ahondaremos más en este tema.

En conclusión

Si tienes en cuenta todo lo mencionado anteriormente, tendrás una buena base sobre la que empezar a construir un curso de elearning atractivo. De esta manera, las personas que lo realicen tendrán una mayor motivación y, por lo tanto, los resultados serán más positivos.

No obstante, ten en cuenta también que, en los tiempos que corren, la atención es un “bien escaso”. La cantidad de estímulos (sobre todo tecnológicos) y de opciones de “cosas que hacer” es abrumadora y hay autores que ya hablan de toda una lucha por la atención de las personas. Es interesante la literatura que empieza a surgir sobre la “economía de la atención’‘.

Desde Dynamium tenemos un enfoque más “romántico”, más personal, de la atención. Entendemos que el ámbito formativo tiene otros objetivos más inherentes y propios de la persona. Pero sí es importante que tengas presente que las distracciones existen y son amplias, por lo que el planteamiento de estrategias para captar y mantener la atención es vital para el éxito de una acción formativa y debe estar presente desde el proceso de diseño del curso hasta su ejecución y posterior evaluación.